lunes, 31 de mayo de 2010

La casa de Arias Correa

Esta casa se encuentra en la esquina formada por las calles Alemanes y Hernando Colón.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

De esta casa, así como de las colindantes, destacan los soportales.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

El de esta casa tiene algo especial, un aporte histórico.

Esta casa presenta una fisonomía distinta a la que tenía originalmente. Es así desde su remodelación en 1968.

Si nos fijamos con más detalle en la columna de la esquina podremos ver la siguiente inscripción:

ARIAS CORREA LABRO ESTA SU CASA AÑO DE 1591

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Sea fruto de la casualidad o por respeto a esta inscripción, a pesar de las remodelaciones sufridas por la cosa, los soportales han sido respetados.

sábado, 29 de mayo de 2010

Monumento a Fleming

Este monumento es desconocido por parte doble, por lo poco se le conoce y por lo poco que se le ve, ya que está en un lugar privado.

Pero le dedico esta entrada porque el monumento, hasta hace poco, era bastante público.

Sir Alexander Fleming, descubridor de la penicilina, visitó Sevilla en una ocasión y en 1957 se aprobó como homenaje un monumento realizado por Juan Abascal Fuentes y pagado mediante suscripción popular tras la iniciativa del diario Sevilla.

Fue inaugurado en los jardines que adornan la entrada del Parlamento de Andalucía.


En 2003, debido a la remodelación de estos jardines el monumento fue desmantelado de su emplazamiento.

Tras estar todo el complejo resguardado en un almacén municipal y el busto en un salón del Ayuntamiento, se alargaron los trámites para buscarle una nueva ubicación.

Finalmente, hubo acuerdo con la Universidad de Sevilla y fue reinaugurado el 20 de octubre de 2004 en un patio ajardinado de la Facultad de Medicina.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

viernes, 28 de mayo de 2010

Las fernandinas

En 1832, reinando en España Fernando VII, nació la Infanta María Luisa.
Para festejar este nacimiento fueron instaladas en la Villa y Corte de Madrid esbeltos faroles y farolas de gran belleza. Eran las primeras farolas fernandinas.

Llevaban una cifra coronada, VII, por el monarca, y una fecha, 1832, por el nacimiento de la Infanta.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Este diseño siguió fabricándose posteriormente, durante el reinado de su hija Isabel II y fue extendiéndose por todo el país.
Esto, unido a lo poco que gusta la figura histórica del monarca, hizo que también se les denomine como farolas isabelinas.

En Sevilla han sobrevivido numerosas farolas fernandinas.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Además de la cifra y el año, otro detalle caracteriza estas farolas, la presencia de la Corona Real.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

El diseño no sólo ha sobrevivido en Sevilla, sino que en pleno siglo XXI siguen fabricándose con este diseño y con los mismos detalles.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

También siguen vivos muchos faroles, con su correspondiente Corona Real.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Pese a que la ciudad ha de modernizarse, a mí personalmente me encanta este diseño. Ojalá sigan floreciendo en determinados puntos de la ciudad, y vuelvan a otros lugares donde estuvieron.

jueves, 27 de mayo de 2010

¿San Sulpicio? No te entiendo...

¿La hermana San Sulpicio? ¿Por qué tendría que saber sobre esto?

Seguramente esta sería la respuesta de muchos de nosotros ante esta pregunta.

Resulta que el escritor Armando Palacio Valdés fue invitado a conocer Sevilla por el presidente del Ateneo mientras se curaba en un balneario de Marmolejo (Jaén).

Armando quedó enamorado de la ciudad y reflejó en su célebre obra La hermana San Sulpicio las costumbres sevillanas que vivió, situando la casa de su protagonista en la calle Argote de Molina, curiosamente antes llamada Marmolejo.

En 1924 fue nombrado Hijo Adoptivo de Sevilla y fue descubierta una placa en la fachada de la casa en la que ambientó dicha obra.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

En 1999, con motivo del LXXV aniversario de este nombramiento, se colocó otra placa, a modo de medallón.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Muchas veces habremos pasado por delante de esta historia, brevemente resumida en estas placas.

Ahora sólo nos queda leer la tan reconocida obra, a ver si nos gusta.

martes, 25 de mayo de 2010

La Cápsula de tiempo... sigue viva

Esta obra desconocida para muchos la podemos contemplar en Sevilla por simple y pura suerte.

Todo estaba preparado para su creación en Córdoba, junto al Guadalquivir, pero pocos días antes de su inauguración no se concedieron los permisos de construcción necesarios.
Por ello, su verdadero nombre es Cápsula de tiempo Córdoba.

Tras este varapalo para Córdoba surge la idea de crear la cápsula para la Exposición Universal de 1992 de Sevilla.

El colectivo Agencia de viaje lo realizó como parte del programa de intervenciones públicas Plus Ultra del Pabellón de Andalucía de Expo'92.


Se construyó un foso de brea de 72 metros de largo junto al Monasterio de la Cartuja, en el Camino de los Descubrimientos.


La cápsula fue inaugurada el 11 de octubre de 1992 a las once de la mañana y cerrada en la medianoche de ese mismo día, el umbral del cierre de Expo'92.
En esta inauguración, donde los ciudadanos depositaron todo tipo de objetos, destacó la presencia de dos personalidades, Antonio Rodríguez Almodovar, Comisario del Pabellón de Andalucía, quien depositó un cuento creado por él explicando el origen mítico de Curro, la mascota de Expo'92, y Plateriyo, la mascota de Andalucía de los niños, y de Emilio Cassinello, Comisario General de Expo'92, quien depositó una caja con sus 160 discursos pronunciados hasta ese momento

En esta imagen de época vemos el momento en que Emilio Cassinello deposita la caja.


También puede verse el momento en vídeo.


A pesar de que parece otra simple cápsula de tiempo más, presenta dos aspectos que la hacen única.
El primero es que fue tapada con una rejilla para que se pudiera pasear sobre ella. El segundo es que esta rejilla tenía la doble función de permitir que se abriera para seguir depositando allí objetos por la ciudadanía. En 2006, con motivo de la presentación de la Iniciativa Sevilla Abierta, ésta junto con el colectivo Agencia de viaje añadieron multitud de objetos a la cápsula, junto a otras 300 personas allí congregadas.



Este es un vídeo recopilatorio de imágenes de dicho día.


Seguro que muchos la han visto y han pensado que es un simple desagüe.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Hay que ver lo que cuesta en esta ciudad colocar una plaquita explicativa...

lunes, 24 de mayo de 2010

La Fuente de los Meones... o lo que fue

La fuente de Hípalis, que así se llama realmente, fue realizada en 1929 por Manuel Delgado Brackembury.

Esta fuente está coronada por una nereida sobre una flor de loto, que representa a Sevilla.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

La nereida aparece rodeada de agua y de niños pequeños que juegan sobre tortugas.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Cuando se inauguró constaba de otras cuatro figuras, cuatro niños con caracolas que flanqueaban la taza de la fuente.
Debido a la disposición de estos niños y la forma de manar el agua fue conocida como Fuente de los Meones.



En los 70 fue desmantelada por las primitivas obras del metro.


Tras la cancelación de aquel proyecto la fuente volvió a su lugar, pero los meones no. Nunca aparecieron.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Desde entonces, no es más que la fuente de la Puerta de Jerez.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

sábado, 22 de mayo de 2010

Toda la Alameda de Hércules... desde la calle Mármoles

La Alameda de Hércules se urbanizó en 1574 como tal, una alameda.
Esta zona siempre fue un terreno pantanoso y para no perder sus orígenes, tras desecar la laguna, se colocaron fuentes a modo de pequeñas lagunas.


Con motivo de esta urbanización se colocaron dos columnas que son el símbolo de este rincón sevillano.
Estas columnas fueron traídas de la calle Mármoles, donde se descubrieron seis columnas de un antiguo templo romano.
Tres de ellas aún pueden observarse allí.



En el traslado, una de las otras tres columnas se fragmentó y las otras dos consiguieron ser colocadas.
Sobre una se colocó la figura de Hércules y sobre la otra la figura de Julio César. Ambas son obra de Diego Pesquera.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Con la restauración de 1764 se colocaron en el otro extremo otras dos columnas, de distinta procedencia, rematadas por leones. Este conjunto es obra de Cayetano de Acosta.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

En 1876 los pedestales de las columnas se protegieron del público con verjas.




Con las sucesivas restauraciones desaparecieron las antiguas fuentes.
Con la reciente restauración de la Alameda de Hércules se colocaron novedosas fuentes de las que mana agua de un pavimento que consta de distintos niveles.



Desaparecieron las verjas que protegían las columnas y se colocó mobiliario moderno como las farolas o un reloj elevado.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Hay que destacar el conjunto escultórico allí colocado tras esta última restauración, formando el Trío de la Alameda.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

La colocación de este conjunto es desconcertante, ya que cada una de las figuras tiene su historia individual.

En 1968 se inauguró el Monumento a la Niña de los peines, cuando ella aún vivía.


Por unas obras, en 2002 fue retirada de su emplazamiento, reapareciendo en el mismo lugar al año siguiente, pero con un pedestal distinto.


En 2007 volvió a ser retirada por la última urbanización de la zona, refugiándose en el patio de una peña flamenca sita en la calle Torrigiano.


En 2009 realizó su última reaparición, de nuevo, con un pedestal distinto.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

En 1991 se inauguró el Monumento a Manolo Caracol, obra de Sebastián Santos Calero.

Fuente: Javier Segura

En 2007 fue retirada por la última urbanizacion de la zona, refugiándose en los jardines de la Casa de las Sirenas, desapareciendo su pedestal.


En 2009, cuando se cumplía el centanio de su nacimiento, reapareció sobre su nuevo pedestal.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Este año, coincidiendo con estas dos recolocaciones, fue inaugurado el Monumento a Chicuelo, obra de Alberto Germán.
El diestro es representado realizando la Chicuelina, que él inventó.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Como curiosidad, podemos observar a vista de pájaro una inscripción en el suelo de la Alameda de Hércules.
Se trata de dos fechas, 1574, año de la creación de la Alameda, y 2007, año previsto para la reinauguración de la Alameda.
Pero como siempre en esta ciudad, los plazos no se cumpieron, y tal acto se llevó a cabo un año después.